Los hospitales y centros de salud públicos de todo el país dejarán de utilizar termómetros y tensiómetros que contengan mercurio, según una disposición del Ministerio de Salud de la Nación que retoma una directiva de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según advierte el organismo, los centros de salud constituyen una de las principales fuentes de liberación de mercurio en la atmósfera, a raíz de las emisiones causadas por la incineración de desechos médicos y los derrames de mercurio metálico, especialmente el utilizado en la confección de amalgamas dentales.
La ministra de Salud, Graciela Ocaña, afirmó que "es función del ministerio de Salud velar por la disminución de la exposición a peligros inevitables y eliminar aquellos superfluos". "El mercurio es un metal pesado de potencial alto impacto tóxico en ecosistemas, en los que cumple un ciclo bioquímico que da por resultado la presentación de varios compuestos capaces de interactuar con elementos del medio físico y la biota, con resultados negativos", manifestó el ministerio en los fundamentos de la resolución.
Por otra parte, recordó que el Consejo de Administración del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) "concluyó que hay suficiente evidencia sobre los impactos globales adversos del mercurio como para requerir acciones internacionales para reducir el riesgo para los humanos y la vida en general por las emisiones de mercurio al ambiente".
El mercurio es utilizado en insumos y dispositivos de uso médico y su descarte, rotura o pérdida "son ocasión para que el sector contribuya no sólo a la alteración potencial de la calidad del ambiente intrahospitalario, sino también a aportar en forma significativa a la carga ambiental global de este tóxico".
La Dirección Nacional de Determinantes de la Salud e Investigación conformará un grupo de trabajo integrado por profesionales de odontología, tecnología médica y salud ambiental para que controlen el cumplimiento de la disposición. El organismo discutirá un plan nacional de restricción progresiva del uso del mercurio como insumo en equipos o prácticas médicas y odontológicas y revisará los protocolos de limpieza y manejo de desechos de mercurio que se establezcan en los centros de salud.
La disposición del Ministerio de Salud fue publicada en el Boletín Oficial de ayer, en la Resolución 1392009, referida al Plan de minimización de exposición y reemplazo del mercurio en el sector salud, bajo el título: "Instrúyense a los hospitales y centros de salud del país los nuevos procedimientos de compra de insumos".
La Coordinadora Regional de la Red Salud Sin Daño, Verónica Ordiozola, consideró la resolución como "un logro que ha sido posible gracias a todos los médicos y enfermeras que forman parte de la Red Salud sin Daño".
"Ellos nos recibieron con interés y nos apoyaron cuando nos acercamos con la propuesta de eliminar el mercurio en sus hospitales; se pusieron a trabajar en sus consultorios y servicios para reemplazar estos insumos y evitar que el sector salud siguiera contribuyendo a este problema de salud ambiental global", expresó.
La entidad recordó la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, las provincias Chaco, Jujuy y La Rioja, y los hospitales de Córdoba, Chubut, Neuquén, Río Negro, San Juan, Santa Fe y Tierra del Fuego firmaron una carta de intención para la eliminación del mercurio y se encuentran en pleno reemplazo de su empleo.
Fuente: DyN vía Crítica Digital
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