Las personas con problemas cardiovasculares presentan un mayor riesgo de sufrir ataques al corazón, ictus o arritmias como consecuencia de una exposición a la contaminación ambiental. Así se indicó durante la celebración del primer encuentro sobre Investigación Traslacional del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), celebrado la semana pasada en Madrid.
Las partículas contaminantes emitidas por la combustión de los carburantes de los vehículos, entre otras fuentes de polución, pueden contener una mezcla de complejos químicos tóxicos, según un estudio publicado en 2007 en The New England Journal of Medicine. El trabajo, efectuado en mujeres, reveló que un incremento de 10 unidades de partículas finas se asocia con un aumento del 76 por ciento de muertes por episodios cardiovasculares, como ictus e infartos.
"Son muchas las investigaciones que estudian de qué manera polutantes como las dioxinas o compuestos como el bisfenol A pueden estar implicados en la aparición de eventos cardiovasculares como malformaciones del corazón o paros cardiacos", señala Adrián Grimes, del departamento de Biología del Desarrollo Cardiovascular del CNIC.
El Estudio Multicéntrico Español de los Efectos de la Contaminación Atmosférica en la Salud señala que dos días de altos niveles de contaminación bastan para elevar la mortalidad en las poblaciones hasta un 1,5 por ciento. Asimismo, un estudio de evaluación de riesgos realizado por el Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (Creal-Imim) liderado por Nino Künzli, sobre los beneficios de reducir la contaminación, concluye que ajustar los niveles reduciría en 1.200 las muertes anuales en el área metropolitana de la ciudad.
"Las enfermedades cardiovasculares como consecuencia de la contaminación ambiental superan en número a las respiratorias", apunta Künzli. Y añade que las personas que poseen esta enfermedad de manera congénita son las que presentan un riesgo mayor de sufrir complicaciones más graves.
Se estima que el cinco por ciento de los bebés nace con alguna complicación cardiovascular. De hecho, "múltiples estudios sugieren que la exposición del la madre al aire contaminado puede ocasionar problemas en el niño, similares a los que provoca el tabaco", apostilla.
Las partículas contaminantes emitidas por la combustión de los carburantes de los vehículos, entre otras fuentes de polución, pueden contener una mezcla de complejos químicos tóxicos, según un estudio publicado en 2007 en The New England Journal of Medicine. El trabajo, efectuado en mujeres, reveló que un incremento de 10 unidades de partículas finas se asocia con un aumento del 76 por ciento de muertes por episodios cardiovasculares, como ictus e infartos.
"Son muchas las investigaciones que estudian de qué manera polutantes como las dioxinas o compuestos como el bisfenol A pueden estar implicados en la aparición de eventos cardiovasculares como malformaciones del corazón o paros cardiacos", señala Adrián Grimes, del departamento de Biología del Desarrollo Cardiovascular del CNIC.
El Estudio Multicéntrico Español de los Efectos de la Contaminación Atmosférica en la Salud señala que dos días de altos niveles de contaminación bastan para elevar la mortalidad en las poblaciones hasta un 1,5 por ciento. Asimismo, un estudio de evaluación de riesgos realizado por el Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (Creal-Imim) liderado por Nino Künzli, sobre los beneficios de reducir la contaminación, concluye que ajustar los niveles reduciría en 1.200 las muertes anuales en el área metropolitana de la ciudad.
"Las enfermedades cardiovasculares como consecuencia de la contaminación ambiental superan en número a las respiratorias", apunta Künzli. Y añade que las personas que poseen esta enfermedad de manera congénita son las que presentan un riesgo mayor de sufrir complicaciones más graves.
Se estima que el cinco por ciento de los bebés nace con alguna complicación cardiovascular. De hecho, "múltiples estudios sugieren que la exposición del la madre al aire contaminado puede ocasionar problemas en el niño, similares a los que provoca el tabaco", apostilla.
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